Esta ha sido la interrogante que muchas empresas han querido responder durante la aparición de la pandemia en el mundo, inclusive se han roto muchos paradigmas y se ha logrado cambiar la forma de trabajar de muchas personas (si es que no es en la mayoría). Lo que sí es verdad es que hemos desarrollado un hábito de trabajo que en un principio era impensable, o muy poco probable, y que ha marcado un hito en la historia:  el Home Office o “Trabajo Remoto”.
A pesar de que muchas empresas, especialmente las mineras y transnacionales, ya realizaban videoconferencia para realizar sus reuniones y evitar trasladarse a lugares alejados o de difícil acceso, el trabajo remoto no era la forma establecida de trabajo de la compañía. Hoy el personal se encuentra laborando desde sus casas apoyándose de la tecnología y herramientas digitales, las cuales seguramente muchos de ustedes siguen utilizando, como por ejemplo:  Zoom, Teams, Webex, Skype, entre otras, las mismas que fueron mejorando su servicio para atender esta necesidad urgente y seguir conectados.

Parte de lo que hemos descubierto es que es posible ser productivos trabajando desde nuestras casas, pero también es verdad que a ciertas organizaciones les queda la duda si realmente los colaboradores “están trabajando o no”.  Como todo, el Home Office tiene ventajas (aumentar la responsabilidad individual, evitar pérdidas de tiempo en traslado, ahorrar en costos de oficina, minimizar bajas por enfermedad, entre otros), como también desventajas (malas conexiones de internet, muchas distracciones, difícil separación de la vida personal con el trabajo, estar un ambiente de confinamiento voluntario, entre otros), pero lo cierto es que es una modalidad que ha venido para quedarse, por lo menos en la mayoría.

Una de las formas de responder esta interrogante, es teniendo bien definido los indicadores de desempeño, tanto del área como del personal. Si logramos esto es más que seguro que obtendremos un buen resultado; por el contrario, si esto no sucede ya sea que no lo hayamos definido o lo hayamos definido mal, es muy probable que el personal o el área estén navegando sin un rumbo definido y a su propio ritmo, con lo cual estemos o no presencial no lograremos cumplir con los objetivos.

Para tener bien definido los indicadores de desempeño, debemos tener bien desplegada la estrategia, principalmente tener claridad en los objetivos, iniciativas y proyectos que nos llevarán a cumplir las metas trazadas. Estos deben estar alineados a los indicadores tanto estratégicos, tácticos y operativos que monitoreen el crecimiento de la organización en el corto, mediano y largo plazo; adicionalmente como parte del ejercicio de despliegue deberemos tener identificados los indicadores de desempeño tanto de las áreas como del personal.

Tomaremos como ejemplo a un vendedor de una empresa de servicios, partiendo de la premisa que el ejercicio y despliegue de la estrategia se ha realizado de forma correcta y consensuada, podemos mencionar algunos indicadores que estarían midiendo el desempeño de esta posición; está de más decir que estos tienen que ser acompañados de información relevante cómo: nombre del Indicador, descripción, unidad de medida, período base, objetivo, periodicidad, entre otros. Dicho esto, podemos mencionar algunos KPI básicos como:  número de llamadas realizadas, número de reuniones virtuales realizadas, ingreso por ventas, diversidad de productos vendidos, cumplimiento al presupuesto de ventas y efectividad de venta. Si a lo largo de un período de tiempo vemos que estos indicadores no tiene una mejora, podemos asumir que la persona realmente necesita una supervisión más cercana, o implique que tenga que ir de manera presencial algunos días a su lugar de trabajo, posterior a esto, tendríamos que realizar una nueva evaluación y analizar los resultados.

Finalmente es importante mencionar que no todas las posiciones tienen la posibilidad de realizar sus labores de manera remota, ya que hay sectores u organizaciones que realizan una transformación del producto o algún servicio especializado, el cuales debe ser presencial.  Sea cual fuere el caso, los indicadores, nos darán la visibilidad de saber si el desempeño del equipo está siendo el correcto y si se están logrando las metas y resultados deseados.


Fuente: Propia

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